Por: Cybernews
EL CAPITOLIO – Javier Aponte Dalmau, representante del Distrito 38 que comprende el municipio de Canóvanas, donde ubica el barrio San Isidro, informó el miércoles que presentó el pasado 2 de febrero, el Proyecto de la Cámara 2307, para denominar la nueva escuela Secundaria Vocacional de ese municipio, con el nombre del profesor Juan Francisco Arroyo Salamán.
“Me parece insólito que se proponga bautizar esta escuela con el nombre de José ‘Chemo’ Soto. Las aportaciones que hacen los alcaldes a su comunidad son parte de su trabajo. Por el contrario, el señor Arroyo fue un gran académico que le impartió lustre a la educación en Canóvanas ganando respeto y admiración de su comunidad por la excelente labor educativa que se le atribuye así como una moral intachable que le distinguió como ciudadano y profesional”, dijo Aponte Dalmau en un comunicado de prensa.
“Míster Arroyo, como se le conocía al profesor Arroyo en Canóvanas, fue además de un gran militar, un excelente académico que impartió clases a la en ese municipio, ganándose el respeto y admiración de quienes por décadas fueron sus discípulos”, agregó.
Aponte Dalmau, explicó que actualmente su proyecto fue referido a la Comisión de Educación que preside la representante Brenda López, quien labora en el informe para dar paso a la pieza legislativa. A juicio del representante, la propuesta legislativa presentada por el legislador Johnny Méndez, a petición de la alcaldesa Lorna Soto, para que la escuela lleve el nombre del exalcalde Soto, fue presentada posterior a la suya.
“Al Proyecto de la Cámara 2346 del compañero Méndez, se le desconoce el trámite legislativo”, sostuvo el legislador.
Por otro lado, insistió en que la construcción del plantel aludido comenzó bajo la administración del alcalde Soto mediante el financiamiento bajo los fondos ARRA, pero su construcción fue detenida por falta de fondos y permisología. Indicó que tuvo que convencer al secretario de Educación y al gobernador para identificar los fondos y continuar el proyecto, toda vez que no se justificaba la construcción de la escuela, pues existen dos programas vocacionales dentro de la región.
“Tuvimos que justificar la reasignación de fondos conforme a un estudio socioeconómico que determinó la necesidad académica del sector y la urgencia de implantar un programas de educación a nocturna para adultos. El Departamento de Educación tuvo que diseñar un programa vocacional diferente tomando en cuenta las necesidades de esa región”, sostuvo el representante.